lunes, 8 de junio de 2009

A dos de tres

Marisa Pineda

“La arena estaba de bote en bote, la gente loca de la emoción…”
La lucha libre tiene 75 años de haber llegado a México. En este tiempo ha tenido épocas de oro y otras sólo para fieles. La actual es de las doradas. La popularidad de este deporte, en el que México es potencia, esta por las nubes, tan alto que cada vez más partidos políticos no dudan en echar mano de luchadores para buscar simpatías a su causa, ya sea sumándolos como promotores que como candidatos.

La lucha libre llegó a nuestro país con la Intervención Francesa. Por allá en que 1910, comenzaron a surgir empresas que presentaban funciones de lucha como espectáculo. Sin embargo, no es sino hasta 1934, con arenas como la Coliseo, Revolución y la México, la “Catedral de la lucha libre mexicana”, que el deporte cuenta con los escenarios que permitirían catapultarlo al imaginario colectivo.

El público que abarrotaba las arenas en esa época empezó a crear a sus mitos, los cuales, con el respaldo de los medios de comunicación, llegarían a alcanzar la categoría de leyendas. El ejemplo más claro hasta nuestros días es Santo, el enmascarado de plata.

En la década de los 50, llegan a las pantallas grandes películas con luchadores en el protagónico. El respetable abarrota arenas y salas de cine. El cine con luchadores se convierte en género: cine de luchadores, y los gladiadores en los astros más refulgentes del nuevo “star system”. Los aficionados brincan las barreras geográficas de los barrios bajos y llegan a las arenas, donde la escala social se desvanece, ahí no hay pobres ni ricos, sólo rudos y técnicos.

Fue en esa época, en 1952, cuando el grupo Los Trincas le pidió al compositor Pedro Ocadiz Guadarrama una canción simpaticona. Ocadiz escribió entonces la “Cumbia de los luchadores” y Raúl Zapata Ferrer puso la música. Los Trincas no grabaron el tema, pero sí el grupo Supersecos, sin que pasara absolutamente nada. La lucha estaba en las arenas, en las pantallas grandes, pero la “Cumbia de los luchadores” no, el tema no aparece en ninguna película ni en ningún programa de la época.
Treinta años más tarde, en 1983, el conjunto África rescata el tema, lo graba y el resto es historia. Desde entonces es la banda sonora de aquellos a quienes nos gusta la lucha libre.

La influencia de la lucha y sus protagonistas –los luchadores, que no los empresarios- es muy grande. En su libro “100 llaves de lucha libre”, Pablo Lavín asienta: “A la popularidad que le dio la televisión a la lucha libre, este deporte correspondió convirtiéndose en el principal factor de venta de aparatos de televisión en México”.

Con tales referencias, pues, no es extraño que haya quienes busquen un poquito de la popularidad del luchador para su causa. Blue Demon Jr. apoya irrestrictamente decenas de actividades para atender a enfermos de cáncer, especialmente niños, padecimiento del cual él es ejemplo de sobrevivencia.

En el 2006, el mismo Blue Demon Jr. cedió el escenario y ocupó su lugar en primera fila para corear vítores en el cierre de campaña de Felipe Calderón. Gladiadores como Atlantis y Dos Caras son parte también de la militancia del partido blanquiazul, al igual que el popular Místico, quien protagoniza un anuncio en las actuales campañas políticas. Dicho anuncio se transmitió, salió del aire, lo volvieron a programar y lo volvieron a quitar. Al momento de redactar éstas líneas el spot de marras está fuera de pauta. Dicen los enterados en asuntos del pancracio que se debe a diferencias de El Místico con el Consejo Mundial de Lucha Libre, empresa a la cual pertenece y la que, aseguran, es propietaria tanto del nombre como del equipo (máscara y atuendos) del personaje.

También en el 2006, cuando el “voto por voto, casilla por casilla”, una constelación del pancracio protagonizó “Lucha por la democracia” un cartel de lujo, en apoyo a Andrés Manuel López Obrador. En la plancha del zócalo de la Ciudad de México se instaló un ring y a él subieron Ringo Mendoza, los Hermanos Dinamita (Cien Caras, Universo 2000 y Máscara Año 2000), el Villano IV y el Villano V, las luchadoras La Diabólica, Zahori, Hiroka y muchas estrellas más. Entre los réferis estuvieron El Maya y El Gatito. Parte importante en la organización y promoción de “Lucha por la democracia” la tuvo El Brazo de Oro, con largo historial pro causa perredista. El cierre de “Lucha por la democracia” fue el encuentro de “El Peje contra las Fuerzas Oscuras”. Era el 2006.

La historia del deporte y la política dan cuenta de la presencia de El Santo apoyando campañas priístas, como la de Gustavo Díaz Ordaz. La popularidad del Enmascarado de Plata era un imán para cualquier acto proselitista. Cuenta la leyenda urbana que en alguna ocasión un candidato a la Presidencia de la República pidió: “dígale (al Santo) que le agradezco mucho su cooperación, pero al paso que vamos, él terminará siendo el Presidente”. En la campaña del año 2000, en los espectaculares se podía ver la imagen del plateado y la frase “Yo con (Francisco) Labastida”, quien perdió la primera magistratura con el panista Vicente Fox.

En la lucha libre hay dinastías que han escrito páginas memorables sobre el ring. Una de ellas es la de los Villanos. Este año, el Villano III, Arturo Díaz Mendoza, fue invitado por el Partido Verde Ecologista para buscar una curul por la delegación Iztapalapa (Distrito Federal); hizo sus pinitos, declinó la invitación y regresó de lleno a la lucha, no sin antes aclarar que tal vez más delante sea el momento para ingresar de lleno a la política.

El ring, ese espacio de seis por seis, cercado por tres cuerdas, ha dado los más grandes héroes de la cultura popular mexicana. Hoy en día es, después del futbol, uno de los espacios más redituables para la televisión. La lucha y los luchadores están, literalmente, hasta en la sopa. No es extraño, entonces, que los mercadólogos políticos hayan entrado a estos terrenos a hacer la lucha.

La arena estaba de bote en bote, la gente loca de la emoción, en el ring estaban los cuatro rudos, ídolos de la afición…

Muchas gracias por leer éstas líneas y con ello hacer que esto valga la pena. Por favor, comentarios, sugerencias, invitaciones, mentadas y hasta felicitaciones en adosdetres@hotmail.com. Que tenga una semana en que los malos momentos salgan del ring.